El LEONBERGER : un corazón tan grande como eso !!!
Mire en los ojos a un leonberger... le dirá todo.
Que es un gran perro pelirrojo, rebosando de ternura y de cariño para su familia con la cual está muy encariñado, siempre cuidadoso y benévolo.
Que su inteligencia, su amabilidad y su fidelidad hacen de él el amigo y el compañero de su amo, sin la sombra del cual no puede vivir.
Que su temperamento espabilado y alegre no excluye moderación en su comportamiento.
Que su excelente carácter equilibrado, su franqueza y su dulzura hacen de él el compañero de juego ideal para los niños a los cuales se dedica cuerpo y alma con una paciencia sin límites.
Le dirá que su gran tallado es igual al amor que tiene para usted.
Estamos en presencia de una calma al temperamento tenaz.
Ladra muy poco, en caso de peligro, sabrá valorizar su fuerza y su bravura para defender los bienes y la vida de sus familiares.
Muy deportivo, le gusta brincar y galopar pero sabe quedar muy tranquilo en casa.Este gran sentimental tiene una inmensa necesidad de cariño y no soporta toda exclusión e incluso su retiro del núcleo familiar, a la punta de una cadena o en una perrera. Su gran felicidad es compartir todo con usted. Nunca agresivo, el leonberger está dotado de un temperamento de los más equilibrados. Hace prueba de un interés pronunciado y de un amor innato para todo lo que es “pequeño”, especialmente los niños y trata con la misma amabilidad los pequeños animales con los cuales cohabita sin problema.
S'Léo à l'ouvrage !
Lo habrá entendido, encontrar a un Leonberger provoca inevitablemente una viva emoción y cuando la pasión por los perros ya existe, eso puede decidir de toda una vida, engendrar una admiración y un afecto sin límites. De este modo nació, en 1982, La Plaine d'Anjou.
Delos et son copain Arras
Fifti et ses bébés
La señorita Letellier se inviste en su pasión sostenida y apoyada por su padre, sus amigos y su primer leonberger Délos. En 1994, Fifty dará a luz los primeros cachorros de la Plaine d’Anjou, orgullosa de llevar este afijo testigo de cariño y de ternura, a la imagen del leonberger.
Les premières expos
Preocupada por hacer bien, la señorita Letellier sabe que el amor no basta al éxito de una cría.
Acumula conocimientos (BPA, BTA luego BTSA) y participa en los seminarios de genética de la escuela veterinaria de Toulouse con el fin de dominar los conocimientos útiles a una cría competitiva.
Tan orgullosa de los que llama sus “bebés”, la señorita Letellier empuja las puertas de las exposiciones desde 1995 y comparte su alegría y su satisfacción con Joy y Jessy, sus dos primeros “bebés” premiados.
Hoy la Plaine d’Anjou mantiene su naturaleza familiar, su modo de funcionamiento es todavía basado sobre el intercambio de ternura y de cariño a pesar de su auge y su número creciente de miembros.
¡La pasión es todavía reina en su seno!